Por Pancho
El 24 de diciembre de 1223 en Greccio, San Francisco de Asís, llegó a Greccio con su inseparable hermano León, para evangelizar a las perversos habitantes de aquella áspera tierra. Dieciséis años antes, Inocencio III había prohibido las representaciones sagradas, por lo que tuvieron que pedir una dispensa a Honorio III.
San Francisco había descubierto una gruta en los bosques montañosos, a pocos pasos de su espartana cabaña, y pensó que era el lugar ideal para hacer revivir el "Nacimiento" del Redentor. En las florecillas cuentan que unos quince días antes de Navidad nuestro Santo dijo: “Quiero evocar el recuerdo del Niño nacido en Belén y de todas las penurias que tuvo que soportar desde su infancia. Lo quiero ver con mis propios ojos, tal como era, acostado en un pesebre y durmiendo sobre heno, entre el buey y la mula… ”Para ello obtuvo la ayuda de Giovanni Vellita, el generoso rico del pueblo, que le consiguió el pesebre, la paja y los animales.
No hubo intervención de personas, pues se colocó un pesebre con heno fresco, debajo del altar portátil y junto a él los animales que la tradición fijó.
La noche de la vigilia, con el toque de las campanas, convocó en la gruta a todos los habitantes de Greccio. Los asistentes, los hermanos de varios conventos de los alrededores, y la gente del lugar, concurrieron a la Santa Misa con teas y cirios encendidos. Vinieron a pie, o a lomos de burro y de caballo, sin darse cuenta, como los pastores llegaron al Pesebre. La historia narra que durante la Santa Misa San Francisco de Asís, se revistió de la dalmática, ya que era diácono, y cantó el Evangelio con voz sonora… Luego predicó al pueblo mientras sus ojos rojos y enfermos lloraron por los sufrimientos del Redentor. Durante su sermón encontró palabras dulces como la miel para hablar del nacimiento del pobre Rey y de la pequeña villa de Belén..
Francisco de Asís murió dos años después. Más tarde en ese sitio se levanto una Iglesia, en la cual un fresco recuerda el hecho. Como referencias más antiguas que tenemos respecto a los primero Pesebres que se realizaron en el mundo, citamos el que fue realizado por Arnolfo di Cambio (Florencia 1289). Este arquitecto de la Catedral de Florencia talló figuras en mármol blanco, parte de las cuales se conservan aún en Santa María la Mayor de Roma.
Durante los siglos XIV y XV las iglesias italianas se llenaron de hermosos Pesebres fijos, como los de Andrea della Robia en el Duomo de Valterra..
Ciertamente el gran invento de San Francisco de Asís, el pesebre, se ha difundido por todo el mundo en diversos formatos: desde los vistosos y artísticos pesebres en los que no falta nada: paisajes espectaculares, ciudades, campos y poblados llenos de vida, escenas diversas en torno al Nacimiento de Jesús, aplicaciones tecnológicas en el movimiento del agua del río, de molinos, de norias, de aserraderos, de figuras y en la iluminación; hasta la realización más sencilla, que se reduce al "Nacimiento": una construcción de madera o corcho en forma de portal o de cueva, en la que figuran tan sólo la Virgen, san José, el Niño, la mula y el buey, y que a menudo forma parte de la ambientación del Árbol. :
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